Los y las estudiantes de Fonseca han tenido un regreso a clases atropellado. A pesar de que la fecha estipulada para volver a las aulas era el cinco de febrero, la mayoría de las instituciones educativas tuvieron problemas para tal inicio porque todavía no hay personal contratado para prestar el servicio de aseo y vigilancia y los cupos no son suficientes para atender a todos los estudiantes. A esto se suman problemas en la infraestructura de los colegios, que ya cumplen más de 80 años de uso.
Por ejemplo, en la Institución Educativa Técnica Agropecuaria de Fonseca denuncian daños graves en las instalaciones del colegio, como lo manifiesta el rector Francisco Javier Núñez: “Han pasado 80 años, entonces es una infraestructura vieja. El tema del cerramiento es un problema grave, la tapia es muy bajita, tiene muchas grietas y huecos. Tenemos problemas con las baterías sanitarias, que también están en mal estado”, cuenta.
Esto obligó a que el ingreso se hiciera de manera gradual entre el 5 y el 14 de febrero, una vez culminen las vacaciones por los carnavales. En Consonante revisamos qué está listo y qué no para que los estudiantes regresen a las aulas. Esto es lo que encontramos:
Los problemas no son nuevos
Desde hace varios años el panorama para el inicio de las clases es el mismo: aulas que están en mal estado y en las que ya no caben los niños, baños que funcionan a medias, filtraciones en los techos, conexiones eléctricas obsoletas y salones sin pintura.
En esa situación recibió la escuela el nuevo rector de la institución Juan Jacobo Aragón: ”En términos generales la infraestructura está muy deteriorada, recursos cero, con muy poco personal de aseo y de vigilancia”. confirma Leonel Rizo Gnecco.
Por eso José Alberto Velázquez Romero, rector de la Institución Ernesto Parodi Medina, cuenta que decidieron no iniciar las clases a tiempo. “El domingo (4 de febrero) la Asociación de rectores del departamento de La Guajira nos reunimos y acordamos no entrar a clases por el mal estado en que se encuentran las instituciones, no solamente el Ernesto Parodi, sino que esto es a nivel departamental”, dice.
A los problemas de infraestructura se suma la demora en la llegada de nuevos docentes, el poco incremento de nuevas plazas y la falta de transparencia en el proceso que han denunciado varios maestros en el departamento. Para las cuatro sedes de la I.E. Ernesto Parodi, llegaron 17 docentes nuevos dos semanas tarde, sin embargo, aún faltan tres para la sede principal. “Me preocupa la falta de docentes, los que venían con horas extras este año no quisieron aceptarlas y ha quedado cierta cantidad de horas disponibles en diferentes áreas. Por ejemplo, el profesor de educación física, el de artística y de matemáticas”, explica Velázquez, rector de la institución.
Esto a pesar de que la población estudiantil de La Guajira ha aumentado el 13 por ciento entre el 2019 y el 2023. Según el reporte del SIMAT a corte 30 de septiembre del 2023, había 82.583 estudiantes matriculados en los 12 municipios no certificados: 31.521 pertenecientes a comunidades indígenas y 51.062 estudiantes no étnicos. En 2024, según afirma la Gobernación, se espera una cifra de 90.000 estudiantes. “La población creció y las aulas quedaron muy reducidas para el número de estudiantes”, denuncia Zulay Amaya, rectora de la Institución Agro ambiental José Pérez de El Hatico. En esta escuela faltan cinco docentes.
Además, el año pasado las escuelas de los 12 municipios no certificados de La Guajira sufrieron por la falta de contratación de personal de aseo y vigilancia. Esto se tradujo en que varios colegios en Fonseca fueron víctimas de robo y tuvieron que iniciar clases este año sin algunos enseres. “Los bienes del colegio están expuestos a los ladrones, ya que se nos llevaron varios aires acondicionados, no podemos dejar nada de valor en el colegio porque se lo llevan. Además no tenemos aseadoras, los niños encontraron las aulas sucias, los patios y le toca a un padre de familia barrer”, manifiesta Amaya.
Por el momento, lo único que está seguro es el transporte y la alimentación escolar. Para el transporte escolar, por primera vez en más de cuatro años, aumentaron la cantidad de rutas y vehículos contratados.
Para la prestación PAE en la población mayoritaria –urbana y rural no étnica– en los 12 municipios no certificados del departamento, la Gobernación suscribió un acuerdo de cooperación internacional con el Programa Mundial de Alimentos (PMA). El contrato, para toda la vigencia del 2024, es por 39.000 millones de pesos. 30.000 millones que aporta la Gobernación y 9.000 millones que aporta el PMA, estos últimos representados en costos de implementación, soporte y asistencia técnica.
Por su parte, la alimentación escolar de 31.521 estudiantes pertenecientes a comunidades indígenas, será atendida por 20 operadores indígenas. Para esto se destinaron 25.000 millones de pesos.
Los padres de familia piden aumento de cupos y atención a la infraestructura
Yuleisy Fernández es miembro de la Junta de Acción Comunal de la urbanización Villa Hermosa y madre de dos niñas que estudian en el colegio Ernesto Parodi Medina. Su mayor preocupación es por los niños que no alcanzan a tener cupos. “Me siento con inconformismo porque hay muchos estudiantes que están sin cupos y queda uno con un sinsabor de esos niños que no tiene acceso a la educación. Ahora con la salida de los niños de los CDI se colapsaron los colegios de estudiantes y el problema más grave es que no le buscan una solución. Yo fui a buscar unos cupos y me dijeron que no había porque estaban colapsados”, cuenta.
Yuleisy reclama también la falta de ventilación de los salones “Hay fallas en las estructuras del colegio. Ellos se la pasan desde las 12 hasta las 6 dando clases sin abanicos, con unas condiciones bravas porque estas temperaturas se ponen tesas”, agrega.
“Hay fallas en las estructuras del colegio. Ellos se la pasan desde las 12 hasta las 6 dando clases sin abanicos, con unas condiciones bravas porque estas temperaturas se ponen tesas”
Yuleisy Fernández
Nailin Molina, por su parte, tiene dos hijos que estudian en la I.E. Agroambiental Jose Pérez de El hatico, donde cursan tercer y sexto grado. Uno de los problemas que más le preocupa es la ausencia de personal de seguridad y la poca cantidad de salones. “El año pasado estuvieron sin vigilante y ya se han presentado robos en el colegio. Además se necesita más infraestructura porque dijeron que iban a construir más salones pero no se sabe cómo va ese proyecto y hay grados nuevos que van a comenzar este año. No todos los salones cuentan con aire o ventiladores”, explica Nailin.
No hay soluciones a la vista
El primero de febrero los rectores del departamento de La Guajira tuvieron una reunión con el nuevo gobernador, Jairo Aguilar, y la secretaría de Educación Departamental, Ladys Diana Ochoa. Durante el encuentro los rectores expusieron todas las problemáticas, sin embargo, sienten que no hay soluciones de fondo.
“Llegamos con un optimismo muy bajo porque no plantearon soluciones de fondo. Yo le decía que esta institución tiene 4.6 hectáreas, 2000 estudiantes, y tengo una sola aseadora. Pero el gobernador Jairo Aguilar se fue de la reunión sin dar una solución a la problemática”, puntualiza Leonel Rizo.
"(...)El gobernador Jairo Aguilar se fue de la reunión sin dar una solución a la problemática”
Leonel Rizo
Angelica Solano, secretaria de Desarrollo Social con competencias en salud y educación en Fonseca, reconoce las deficiencias pero asegura que poco pueden hacer desde la alcaldía. “La infraestructura lleva más de 80 años, se encuentran bastante deterioradas, no hay garantías para tener a nuestros estudiantes bajo esta inseguridad. No todo le corresponde al municipio, pero sí vamos a trabajar en armonía. Hay que tocar puertas para poder convenir con los actores y mirar de qué manera minimizamos estos problemas. Yo creo que este proceso va a ser lento, pero créanme que hay mucho compromiso de parte de la administración”, explica Solano.