Ha pasado un mes y medio desde que 14 dueños de hoteles y 11 de restaurantes hospedaron y alimentaron a alrededor de 400 bailarines que se congregaron en Tadó del 28 al 30 de abril para participar en el festival de la Jotatón. Sin embargo, en todo este tiempo los comerciantes no han recibido los pagos por los servicios prestados, que ascienden a 45 millones de pesos, lo que está afectando gravemente su economía.
Según Beatriz Garcés, directora del Grupo La Platina y organizadora de la Jotatón, los pagos eran responsabilidad de la Alcaldía y de la Gobernación. “Asistí a varias reuniones con el Consejo Departamental de Danza y la Secretaría de Cultura donde se acordó realizar el encuentro departamental de danza la Jotatón en Tadó. La gestión de los recursos presentó fallas desde su ejecución pues no daban los tiempos, por eso se acordó realizar un convenio entre la Alcaldía y la Gobernación para que el proceso fuera más rápido. Los acuerdos estaban claros en las responsabilidades y la Secretaría de Cultura gestionaba a través de Gobernación”, dice.
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El pago de los comerciantes quedó en medio del cambio de Gobernador tras la suspensión de Ariel Palacios por presuntas irregularidades en un contrato. Farlin Perea fue designada como gobernadora encargada el 2 de enero de este año y dejó como secretaría de Cultura a Aura Violeta Castillo, quien adelantó las conversaciones para la realización de la Jotatón.
Palacios y su secretario de Cultura, Hedrix Gutiérrez, se reintegraron en los cargos en junio de este año. Sin embargo, Gutiérrez indica que no fue informado sobre la deuda durante el proceso de empalme.
¿Qué dicen los comerciantes?
Los comerciantes afirman que con el evento pretendían impulsar el crecimiento de la economía y, ahora, ante la falta de pagos se han visto perjudicados y asumiendo deudas cada uno de hasta 4,8 millones de pesos.
Marco Alexis Moreno Murillo, dueño del Hostal Villa Rome, es uno de los comerciantes que prestó sus servicios al evento hospedando personal en su hotel. “Me vinculé a este proceso a través del director del Instituto de Deportes y Recreación de la Alcaldía y hospedé a 38 personas durante dos días, cobrando 40.000 pesos por habitación, lo que arrojó un total de 3.040.000 pesos. El hecho de no recibir el pago oportuno me genera dificultad en el cumplimiento de los contratos laborales y deudas con los proveedores de insumos para el aseo, así como también con los trabajadores que contraté para atender al personal”, dice.
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Leidy Mosquera Giraldo, propietaria del Centro Recreacional San Antonio, también hace parte de los comerciantes que esperan el pago de sus servicios. “Atendimos a 61 personas y cobramos 40.000 pesos por persona para un total de 4.800.000 pesos. Acá recibimos a las delegaciones de Valle del Cauca, Lloró, Medellín y Bogotá”, señala.
“Nosotros solo suministramos el alojamiento porque ellos nos confirmaron la alimentación un día antes, a las 9 de la noche, y sin ningún anticipo por lo cual no nos comprometimos a suministrar alimentos. Terminado el evento solicité el pago y me enteré que eso estaba embolatado”, agrega.
“Tuvimos que invertir lo poco que teníamos porque había que comprar elementos de aseo y pagarles a los empleados. Teníamos una expectativa muy grande con este evento, nos tenían que pagar por anticipado y estamos en la incertidumbre porque no sabemos qué va a pasar, lo cual nos hace suponer que los recursos están perdidos”, puntualiza Giraldo.
Otro comerciante, quien pidió no revelar su nombre, indica que tiene una deuda superior a los 4 millones de pesos. “Suministré 52 desayunos, 52 almuerzos y 52 cenas por los días del evento, donde me quedaron debiendo 3.660.000 pesos. Yo tenía la expectativa de ganarme unos pesitos con este evento, pero mire. Estoy debiendo 4.700.000 pesos porque pedí prestado dinero a interés para poder suministrar esos alimentos”. Y agrega que con la Alcaldía no se hizo cuenta de cobro, ni compromiso firmado y que le dijeron que una vez terminaran el evento inmediatamente pagarían la plata.
Por su parte, Beatriz Garcés, coordinadora de la Jotatón, advierte que está preocupada con la situación porque fue ella quien habló con los comerciantes con la esperanza de que la Gobernación y la Alcaldía cumplirían con todos los compromisos monetarios.
“El impacto por el incumplimiento es muy grande y negativo, ya que la mayoría de la personas, especialmente los de los restaurantes, prestaron plata a interés para cumplir con el compromiso. Es desesperante para ellos y muy incómodo para nosotros no poder resolver esa situación. A diario se reciben mensajes, llamadas y visitas y no sabemos qué responder”, asegura.
¿Qué dice la Gobernación?
Hedrix Gutiérrez, secretario de Cultura del Chocó, advierte que la responsabilidad está en manos de la Alcaldía porque no ha entregado el informe de los pagos pendientes. “La Alcaldía de Tadó debe entregar el informe para poder pagar estos recursos. No se ha cancelado porque la Alcaldía no ha entregado lo que corresponde (...) La Platina está cobrando pero no han entregado los soportes a la Alcaldía”.
Gutiérrez agrega que una vez reciban los documentos del convenio y los soportes de las deudas, se hará la resolución de pagos y las cancelaciones.
“No es posible proceder al pago de una deuda que no está soportada. La secretaria Aura Violeta Castillo que fue la que hizo el convenio y quien organizó todo nunca me hizo empalme de eso. Es más, nunca se ha acercado a la Secretaría a informar o a entregar o a decir que dejó (...) No sé en qué etapa dejó el proceso”, dice.
Por su parte, Consonante intentó comunicarse con la Secretaría de Cultura de Tadó para que informaran sobre la demoras en los pagos e información del convenio y no fue posible.
Lo que sigue
Desde la coordinación del evento, a cargo de Beatriz Garcés, están organizando toda la documentación y soportes para llevarlos a la Secretaría de Cultura Departamental de tal manera que ellos revisen y avalen el pago de los comerciantes que están a la espera