Escucha este recorrido aquí:
Soy Oscar Peñaranda (Zehero), periodista de Fonseca. Buscando razones para que vengan a este municipio les pregunté a algunos habitantes por qué vale la pena venir a nuestra casa. Luego, busqué hechos cotidianos y de mi infancia y con eso construí un recorrido por estaciones fonsequeras con el fin de presentarles la mejor invitación para cautivar los corazones de los futuros visitantes y lectores de este trabajo.
Estoy seguro que si no vienen a conocerlo pronto por lo menos este nombre estará incluido en su lista de próximos destinos. Venir a Fonseca es estar en una tierra donde abundan los cantores, donde entre cardón y tunas escucharán el sonido de un acordeón, como lo dijo el maestro Chema Gómez en su canción. Estar en Fonseca se resume en la frase de Efraín Medina “Fracho”, quien dice que volver a Fonseca es “repetir la dicha de nacer”. Todos estos recuerdos y vivencias componen las diez estaciones en donde les mostraré por qué deben venir a este rincón guajiro.
- Estación música
En cada hogar fonsequero hay un niño, joven o adulto con dones para el acordeón, guitarra, la caja, la guacharaca y la trompeta, instrumentos que hacen parte del legado ancestral guajiro. Fonseca es tierra de cantores y es reconocida nacional e internacionalmente por sus aportes en la cultura. Conocer sus composiciones es una de las primeras estaciones obligadas.
Sus orígenes de acordeón están marcados, sobre todo, por importantes composiciones y sonatas de juglares como Carlos Huertas “El Cantor de Fonseca”, Luis Enrique Martínez “El Pollo Vallenato”, Chema Gómez, Luis Pitre, Hugues Peñaranda y José Hilario Gómez. Todos han construido el legado de este lugar a través de sus obras. Legado que artistas jóvenes como Jane Fernández, Jhon Daza, Sara Acosta, Iván Pallares, José Oñate Junior y Fawell Solano actualmente contribuyen a conservar.
- Estación diversidad
La descendencia de estas tierras es bastante pluricultural: en Fonseca convivimos desde la etnia wayuu, que son nativos ancestrales, con mestizaje africano y español, que no solo han diversificado la etnia, también los orígenes musicales. Además, en Fonseca hay una gran cantidad de personas migrantes provenientes de Venezuela, país fronterizo, y una enorme comunidad paisa que se ha asentado en el territorio.
- Estación paz
Fonseca es territorio de paz. Actualmente es un municipio PDET (Programas de Desarrollo con Enfoque Territorial). Conejo fue seleccionado para los diálogos que se llevaron a cabo para la reconciliación y hoy hay varios proyectos sociales y obras que están contribuyendo a consolidar la economía, cultura, turismo y emprendimiento en esta zona con reincorporación a la sociedad como el área de Pondores, a media hora del casco urbano de Fonseca.
- Estación turismo
El río Ranchería, la Serranía del Perijá y otros lugares paradisíacos como las cascadas descubiertas hacia las marimondas, en el corregimiento de Conejo. Así como las cavernas y piscinas naturales en el resguardo Mayabangloma son otras paradas imperdibles.
En Mayabangloma se destaca el baile típico “La Yonna”, donde las mujeres usualmente invitan a bailar a los hombres persiguiéndolos por toda la pista de baile. Verlo es una experiencia muy bonita y divertida y los colores expuestos de las ventas de artesanías wayuu, como el maquillaje y los paisajes semidesérticos, hacen de la experiencia una inigualable en Colombia.
- Estación noche
Con más de veinte disco-bares, terrazas y discotecas, la noche en Fonseca es bastante concurrida por su música y alegría. Alrededor de estos sitios también podemos encontrar ventas de comida. En todo el casco urbano, por las diferentes calles y las 24 horas, encuentran cómo saciar el apetito, incluso con servicio a domicilio.
- Estación gastronomía
El plato típico es la iguana con coco, que aunque es muy apetecido tanto por la población local como por los visitantes, es una especie en extinción. Desde hace muchos años, sin embargo, se come este plato en Fonseca. ‘El negro iguana’ es uno de los anfitriones más reconocidos para la preparación, tanto que al preguntar dónde encontrarlo más de un residente les indica cómo llegar.
Entre otras preparaciones no pueden dejar de probar en su paso por estas tierras el sancocho de mondongo y de gallina, de este último también pueden encontrar un platillo guisado, así como de conejo: todas son preparaciones que muestran lo mejor del sazón fonsequero.
Tampoco pueden dejar de probar las variedades de arroces que preparan en el Hatico, donde mujeres cocineras aprendieron a hacer más de diez preparaciones distintas de arroz, pues en nuestras tierras abundan estos cultivos.
El arroz de café y de chocolate, ya que he tenido la oportunidad de probarlos, son deliciosos. Y cerca al Hatico está Mayabangloma, resguardo indígena wayuu en donde encontrarán comida típica ancestral, lugares que los cautivarán al estar rodeado por montañas de la Serranía del Perijá.
De paso por el restaurante Zuny, en el resguardo indígena, no solo pueden encontrar artesanías hechas por nativos como mochilas, mantas y chinchorros con diseños guajiros propios; también platillos como: chivo con bollo y freche.
También están otras preparaciones típicas de nuestra región como la variedad de dulces de maduro, leche, toronja, ñame, espejuelos y demás preparaciones hechas por manos de importantes dulceras del municipio.
- Estación comercio
Tanto la cultura como el comercio se han diversificado. En los últimos años han surgido varios emprendimientos que también han aumentado el flujo de negocios y por lo tanto la economía local. Acá podemos encontrar almacenes de cadena y hasta una plaza comercial, con diferentes autoservicios, y cacharrerías en donde los fonsequeros y habitantes de municipios y corregimientos vecinos vienen a hacer sus compras del diario.
El comercio está diversificado culturalmente tanto con locales propios, de paisas, ecuatorianos a los que amistosamente le decimos “los kinguis” y venezolanos así como de habitantes de otras regiones del país que ven en Fonseca un potencial comercial. Con seguridad, de algo se antojan.
- Estación de culto
Con tres iglesias católicas dentro del casco urbano y más de diez templos cristianos, Fonseca parece uno de los municipios más devotos a Dios. Acá se dan importantes celebraciones religiosas como la Virgen del Carmen, el patrono San Agustín (que está desde la época de las colonias), Jesús de la Misericordia y otros.
Otra de las paradas obligadas es el mausoleo de Carlos Huertas, en el cementerio de Fonseca; y el de Luis Enrique Martínez, en el cementerio de El Hatico. También hay en la glorieta dos esculturas de cada uno. Todo el que viene sabe que esos son puntos de encuentro en el municipio.
Si desean conocer la historia musical y costumbres de estas tierras con mayor profundidad, no pueden dejar de visitar El Museo Nacional del Vallenato, abierto el 9 de diciembre de 2022, donde se reúne historia del vallenato y algunos principales exponentes fonsequeros y guajiros.
Dentro de este recinto está el Museo Histórico y Casa La Provinciana, que por años contribuyeron a conservar las memorias del municipio. Una unión entre dos instituciones que se llevó a cabo en acuerdo de sus fundadores para conservar todas las riquezas patrimoniales en un solo lugar.
En el campamento de los firmantes de paz, en Conejo, está el Museo de Cultura de Paz en donde se narran todos los eventos del conflicto armado hasta la firma del acuerdo.
Y en El Hatico está la Casa Museo Luis Enrique “El Pollo Vallenato”, lugar de nacimiento del juglar. Allí encontrarán toda la historia del personaje que se inmortalizó por los acordes que dejó para tocar la música de acordeón.
- Estación carnaval
Recién finaliza las festividades de diciembre y en febrero se prende toda la alegría del carnaval donde los diferentes barrios articuladamente con la Alcaldía preparan a su reina y sus comparsas para mostrar sus talentos en la danza, confección de trajes y su creatividad y toda la riqueza de este folclore como el baile típico de fonseca “colita abierta y colita cerrá”, que por estos días se puede ver bailar en la tarima tierra de cantores.
- Estación Festival del retorno
Este año se llevó a cabo la edición 49 del Festival del Retorno, quizás el evento más importante de Fonseca debido a que se suma a la celebración de actos religiosos como el patrono San Agustín. En el retorno a los fonsequeros que vuelven a casa se muestran los talentos en la música y el arte como: composición, canto, baile, acordeonistas, exposiciones de artes, comida típica y emprendimientos locales en donde tanto anfitriones como visitantes aprecian los distintos eventos.
Estas son las 10 razones que encontré para invitarlos a Fonseca y como fonsequero que soy me despido al son de una canción: “Allá en fonseca donde brilla la luna entre cardón y tunas suena un acordeón”.