Edilma Loperena lleva 20 años trabajando por las mujeres wiwa. / Ilustración: Camila Bolívar.
San Juan del Cesar Noticias

Cuatro noticias positivas de San Juan del Cesar en 2022

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La llegada de la producción de la novela de Leandro Díaz movió el empleo, la hotelería y el turismo. También se destaca que la Unesco reconoció el saber wiwa como patrimonio inmaterial de la humanidad. Un repaso por las buenas noticias del año.

Los saberes de los pueblos de la Sierra, entre esos el wiwa, fueron reconocidos por la Unesco

La Unesco reconoció, el 29 de noviembre, al sistema de conocimiento ancestral de los cuatro pueblos indígenas de la Sierra Nevada de Santa Marta (SNSM) –arhuacos, koguis, wiwas y kankuamos– como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad.

Este sistema de prácticas y de conocimiento ancestral reconocido por la Unesco como patrimonio cultural inmaterial de la humanidad está basado en la Ley de Origen. Este es el mandato sagrado que contiene los principios, las funciones y las expresiones que guían las acciones de las comunidades en los diferentes ámbitos de la vida cotidiana: la agricultura, la medicina tradicional, el manejo de los sitios sagrados e incluso la realización de tejidos y la construcción de viviendas. 

Para los cuatro pueblos de la SNSM el territorio es más que un límite o un espacio definido, es donde está escrita la Ley de Origen y donde se escucha lo que dice la Madre Tierra y los Padres Espirituales. San Juan del Cesar (La Guajira) hace parte del territorio donde habita el pueblo wiwa.

Dwirunney Torres, delegado en temas ambientales de la Confederación Indígena Tayrona del pueblo arhuaco, afirma que aunque este reconocimiento que hace la Unesco es importante pues visibiliza muchos años de lucha de los mamos y de los líderes espirituales, es simbólico y se necesita comenzar a trabajar a nivel interno y externo. “Para llegar a unas verdaderas garantías es necesario que el Estado empiece a implementar unas políticas claras para trabajar en el territorio. También es importante mirar cómo se empieza a fortalecer ese sistema de conocimiento a nivel de los pueblos”, dice. 

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La grabación de la novela de Leandro Díaz dinamizó la economía

Ilustración: Camila Bolívar

San Juan del Cesar se ha posicionado como un lugar ideal para el rodaje de series y telenovelas. En los últimos años, se han grabado cuatro grandes producciones en sus calles y corregimientos: Los Morales, La Cacica, Diomedes y, más recientemente, Leandro Díaz.

La atención que recibió el municipio durante el año pasado por la grabación se tradujo en más oportunidades de empleo directo e indirecto para sus 40 mil habitantes. Con las grabaciones de la telenovela del canal RCN sobre la vida del cantautor vallenato, los corregimientos como Zambrano, Los Pondores, La Junta y La Peña han adquirido otro ambiente. “Se ve emoción, gente en el pueblo. Esto era muy aburrido y ahora se ve la alegría de la gente”, dijo Carmen Rosa, habitante de Zambrano. En La Peña, además, tuvieron la oportunidad de presenciar una parranda de Silvestre Dangond en mayo. 

El canal RCN contrató a más de 300 personas para labores de logística, conducción, actuación y aseo. Asimismo, arrendó casas para grabar algunas escenas y ha copado las habitaciones de los tres hoteles más importantes del municipio. A su vez, generó empleos indirectos en la venta de hielo y fritos.

Con las grabaciones los hoteles volvieron a brillar. La ocupación permanente de varias habitaciones por parte del equipo del canal RCN le ha dado un impulso al sector, uno de los más golpeados por la pandemia del Covid-19. Tres de los cinco hoteles que existen en San Juan del Cesar fueron utilizados por el canal. En Casa Murillo se hospedaron los directores y productores; en el Hotel Saraje se alojó el personal técnico, y en el Hotel Arisuan estuvo el elenco. 

También aumentó el empleo para los jóvenes. La empresa contratista GSP Logística y Eventos, gerenciada por Leonardo Zambrano, fue la encargada de contratar personas del municipio para que trabajaran en la logística de las grabaciones: cargar equipos, ayudar a organizar locaciones y garantizar la comodidad de los actores. Background Talento y Logística SAS fue la encargada de coordinar el personal humano. Además de los extra para las escenas.

La cultura y el turismo volvieron a las calles después de dos años en pausa por la pandemia

Fotografía: Alcaldía de San Juan del Cesar
Fotografía: Alcaldía de San Juan del Cesar

Las fiestas alrededor de la música vallenata volvieron con fuerza después de dos años de pandemia y las restricciones por los contagios de Covid-19. El calendario cultural en el municipio se inició con el Carnaval, que reunió a unas 14 comparsas que danzaron por las calles de San Juan del Cesar. La reactivación del recorrido turístico de la Ruta del Cacique también logró atraer turistas de Colombia y otras partes del mundo, quienes llegan al corregimiento La Junta atraídos por la historia del fallecido cantante Diomedes Díaz. 

La agenda cultural cerró con la 45 edición del Festival de Compositores, que nuevamente atrajo a escritores de vallenato profesionales, aficionados y verseadores de distintas partes del Caribe colombiano. Además de conectar con la tradición de composición que ha hecho famoso a este municipio del sur de La Guajira, los eventos se convirtieron en una oportunidad de impulsar la economía local.

Acá le contamos más sobre qué significa ser compositor en el sur de La Guajira

“Desde el martes de Semana Santa hasta el domingo vino mucha gente a La Junta. El viernes atendí más de 500 personas pero no todas entraron a mi sitio turístico. Pudieron ser cada día más de 1.000 personas. Las calles no se veían quietas un segundo”, contó Rosa Elvira Díaz, hija de Diomedes Díaz y gestora cultural del corregimiento de La Junta, una vez terminó la Semana Santa.

Se inició el proceso de verdad, justicia y reparación a las víctimas del conflicto armado

Ilustración: Camila Bolívar

El 18 y 19 de julio se dio una escena que hasta hace unos años era impensable en San Juan del Cesar. Ese día 12 exmilitares del Batallón La Popa, ubicado en la vía que conduce hacia Valledupar, reconocieron que habían participado en el asesinato de al menos 127 personas del sur de La Guajira y el norte del Cesar, entre enero de 2002 y julio de 2005. Entre los casos estaban incluidos los jóvenes Luis Eduardo Oñate Nieves y Carlos Mario Navarro Montalvo de San Juan. 

La audiencia pública de reconocimiento se dio frente a los jueces de la Jurisdicción Especial para la Paz -JEP- y las autoridades indígenas kankuama y wiwa, que fueron dos de los pueblos más afectados por las ejecuciones extrajudiciales.

Si bien fue un acto incipiente en el proceso de verdad, justicia y reparación en el municipio, permitió que más víctimas se unieran para reclamar por sus derechos, tuvieran visibilidad los hechos de violencia y recibieran apoyo de organizaciones sociales.

 “Una sola golondrina no hace verano. Las dos familias nos hemos apoyado mucho, siempre hemos estado insistiendo en qué pasó, quién fue, cómo fue”, dijo Osmaira Nieves , hermana de Luis Eduardo, al hacer un balance del acto de reconocimiento. 

Sin embargo, los familiares de las personas asesinadas quedaron pendientes de que el aporte de los exmilitares pudiera develar quién dio la orden de cometer las ejecuciones extrajudiciales. Además, aseguraron que aún hace falta convocar, reconocer y reparar muchas más víctimas en San Juan del Cesar.

Estas fueron otras de las deudas que quedaron pendientes en la audiencia.

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