Los y las estudiantes de los 12 municipios no certificados de La Guajira iniciaron las clases el 6 de febrero igual que como terminaron el año pasado: sin transporte escolar. A pesar de que la secretaría de Educación departamental firmó el contrato en diciembre del año pasado por más de 18 mil millones de pesos con la Unión Temporal del Caribe y todo parecía estar listo para el nuevo año escolar, el comienzo del servicio se retrasó y apenas la semana pasada salió a la luz pública el obstáculo: una serie de requisitos técnicos por los que los vehículos que tienen los transportadores de la zona no podrían ser utilizados por el contratista.
Los vehículos serían demasiado antiguos
Según la ley, una parte de los carros y busetas que prestan el servicio de transporte escolar deben pertenecer a la población del área de influencia donde se prestará el servicio para fomentar el desarrollo económico y la contratación de mano de obra local. El problema es que muchos de los vehículos que tienen los transportadores, quienes en su mayoría pertenecen a comunidades étnicas, no cumplen con las condiciones técnicas que exige el Ministerio de Transporte.
Según la resolución 3018 del 4 de agosto de 2017 que expidió el Mintransporte los vehículos antiguos , los vehículos debían ser sustituidos por modelos más nuevos con plazo máximo hasta el 1 de enero de 2024. Esta transición se planteó bajo el siguiente esquema: los modelos 1986 y anteriores deberán ser reemplazados por vehículos modelo 2006 o posterior a más tardar el primero de enero de 2020. Los vehículos modelo 1987 a 1992 deberán ser reemplazados por vehículos modelo 2007 o posterior a más tardar el primero de enero de 2021. Los modelos 1992 a 1998, por modelos 2008 o posterior a más tardar el primero de enero de 2022. Los modelos 1999 a 2005 por modelo 2009 o posterior a más tardar el primero de enero de 2023. Los modelos 2006 y posteriores por modelos 2010 o posteriores a más tardar el primero de enero de 2024.
Sin embargo Ángel Estelló, gobernador del cabildo de Rodeito El Pozo en Hatonuevo, cuenta que el año pasado el entonces director territorial del Ministerio de Transporte, Arcece González y el secretario de Gobierno encargado del departamento, Javier Ripoll, les dijeron que habían aprobado una prórroga de la resolución 3018, por lo que tenían más tiempo para renovar sus vehículos. “Hicimos mesas de trabajo, firmamos y radicamos en Uribia el documento de la solicitud de la prórroga y se la llevó el secretario de Gobierno que estaba en el departamento. Luego nos notificaron que nos habían aprobado dos años más para la circulación de esos vehículos que están en cada uno de los territorios”, cuenta Estelló.
Estelló, quién ha liderado las mesas de trabajo para la reanudación del servicio, afirma que apenas el viernes de la semana pasada la Secretaría de Educación expidió una circular en la que les notificaba que finalmente sus vehículos no podrían usarse para el servicio. “A ellos (los dueños de los vehículos) los mandan actualizar documentos, a comprar pólizas, hasta el Soat, tecnomecánica, generan un gasto y después de que se actualizan documentos vienen y dicen que esos vehículos no pueden ser porque tienen que ser mínimo del 2006”, asegura.
En Rodeito El Pozo hay, por ejemplo, ocho vehículos cuyos modelos oscilan entre 2002, 2003 y 2004. Según las condiciones del Ministerio de Transporte ninguno de estos podría prestar el servicio este año. “Si ellos sabían que esto iba a pasar tenían que notificarnos para haber hecho esa socialización en cada uno de los territorios resguardados y no resguardados en el sur de La Guajira y poder iniciar el servicio normalmente”, dice el gobernador.
El secretario de Educación se lava las manos
En una entrevista emitida en la emisora Cardenal Estéreo el miércoles 8 de febrero, el secretario de Educación Adaulfo Manjarrés optó por culpar a las comunidades indígenas por el retraso del transporte escolar: “Ellos exigen que los vehículos que presten el servicio sean de ellos mismos, pero los que tienen no cumplen con las características mecánicas conforme a la resolución 3018 de 2017”, aseguró.
A pesar de que Manjarrés tiene a su cargo la contratación del servicio, el Secretario insiste en que la Gobernación no tiene nada que hacer. “Ellos mismos están obstaculizando el inicio del contrato y nosotros aquí no tenemos nada que hacer”, agregó el funcionario que asumió funciones el 20 de octubre del año pasado. Según la Secretaría, la Unión Temporal del Caribe habría notificado el inconveniente por el que no ha dado cumplimiento al contrato. Sin embargo, no precisan cuándo se dio el aviso.
Las declaraciones del Secretario generan desconcierto entre los líderes indígenas, quienes afirman que Manjarrés asume una actitud constructiva en reuniones internas y luego los señala públicamente. “Después de una mesa de trabajo que tuvimos ayer dice en los medios de comunicación que el transporte escolar en La Guajira no ha iniciado por culpa de las autoridades tradicionales y eso es totalmente falso. Ellos han generado aquí conflicto interno, porque si desde un principio hubiesen dicho que no se había prolongado la resolución 3018, que se tenían que buscar vehículos nuevos, pues nosotros habríamos tomado una decisión”, puntualiza Estelló.
Hasta el momento no queda claro por qué si desde la Secretaría tenían el inventario de los vehículos que han prestado el servicio por tantos años, solo notificaron a los transportadores hasta el viernes 3 de febrero, tres días antes de iniciar las clases. Los líderes indígenas aseguran que esta dependencia de la Gobernación conoce desde hace mucho tiempo los modelos de los vehículos que no cumplen los requisitos del Mintransporte.
¿Por qué apenas se encontró que los vehículos no son aptos según la resolución 3018 de 2017. Esta pregunta fue enviada por Consonante a la oficina de comunicaciones de la Gobernación. “La verdad en este momento no tenemos respuesta, el tema se está analizando y discutiendo con las comunidades indígenas y los operadores del servicio”, respondieron desde la oficina de Comunicaciones de la secretaría de Educación departamental*.
Qué dicen las familias de las y los estudiantes afectados:
En medio de este enredo se encuentran los 7968 estudiantes de los 12 municipios no certificados de La Guajira que necesitan el servicio de transporte escolar para llegar a clases. Al igual que registramos el año pasado en Consonante, muchos caminan largas distancias para ir a la escuela, han sido víctimas de la inseguridad y, en algunos casos, han optado por abandonar el colegio.
- “Los papitos que pueden están trayendo a los niños, pero hay niños que no han podido venir porque no hay forma para transportarlos. Esperamos que la próxima semana pueda iniciar el servicio”, cuenta Sobeida Díaz Epiayú, líder comunal de la vereda Los Toquitos.
- “Yo tengo un niño de nueve años y el colegio está muy lejos. Yo no tengo cómo llevarlo, se va caminando, lo mando en colita o me hacen el favor de llevarlo. Acá hay varios niños que están afectados con este problema”, cuenta Ingris Vergara, madre de familia que vive en el sector de La Laguna.
Para protestar por la falta del servicio, el miércoles 8 de febrero las comunidades indígenas bloquearon en el sector de Alto Pino, en Manaure, La Guajira.
Las soluciones que proponen ambas partes
Desde la Secretaría de Educación y la Unión Temporal Caribe han propuesto que el servicio lo presten “vehículos de afuera”. Esta solución, además de que afectaría la economía de los dueños de los vehículos y sus familias, ha sido problemática en el pasado.
“Una vez sucedió que trajeron vehículos de afuera y los conductores no quisieron penetrar hasta la comunidad por la dificultad en las vías de acceso. Tuvimos muchas dificultades y hasta agresiones porque los conductores querían dejar a los niños hasta donde ellos podían entrar, pero no hasta el punto real donde tenía que ir”, confiesa Ángel Estelló.
Por otro lado, comprar un vehículo nuevo está por fuera de las posibilidades de muchos de los conductores. “Salir ahora a buscar un vehículo con las condiciones que se están exigiendo sale muy costoso, este tipo de vehículos, camionetas y camperos, son para zona rural, trochas. Además comprar un vehículo nuevo de este tipo para meter en trochas también es correr un riesgo de que lleguen los ladrones y le quiten el vehículo a uno. Estamos esperando que la empresa nos notifique cuál es el paso siguiente para ver de qué manera podemos trabajar”, cuenta Yesney Tarifa, conductor del servicio de transporte escolar en la zona rural de Fonseca.
Por su parte, el Departamento Administrativo de Tránsito y Transporte DATT y la Secretaría de Educación Departamental solicitaron esta semana al Ministerio de Transporte la ampliación del periodo transitorio para prestar el servicio escolar bajo la supervisión técnica de la DATT Guajira. Además, se acordó en una comisión que se reunió el 7 de febrero que representantes de las comunidades indígenas y la institucionalidad del departamento visitarán las instalaciones del Ministerio de Transporte en Bogotá para dar celeridad a la prórroga.
Lo que sigue
Los líderes indígenas solicitan la visita del ministro de Transporte Guillermo Reyes y del ministro de Educación Alejandro Gaviria a La Guajira para llegar a acuerdos y así poder reanudar el servicio lo más pronto posible.
Mientras tanto, los rectores de varias instituciones del sur de La Guajira siguen esperando la contratación de más docentes, solucionar la prestación del servicio de aseo y vigilancia, mejorar la infraestructura de los colegios y atender los problemas de rendimiento académico.
*Consonante contactó a Adaulfo Manjarrés, secretario de Educación departamental, en varias ocasiones antes de la publicación de esta noticia, pero Manjarrés no respondió la solicitud.