En la mañana de este viernes cuatro funcionarias de la Secretaría Departamental de Salud quitaron los sellos que mantenían cerradas las áreas de urgencias, hospitalización, farmacia y rayos x. El 6 de diciembre, el mismo ente de control ordenó el cierre por fallas en la planta física, falta de insumos y equipos médicos que impedían una adecuada prestación de los servicios.
Durante diciembre y enero se hicieron los correctivos que se necesitaban para habilitar los servicios: se pintaron y resanaron las paredes, se corrigieron filtraciones en los techos, se instaló el aire acondicionado en la farmacia y una bomba de agua para abastecer al centro médico, que estuvo dañada más de 20 años.
Con el fin de mitigar el impacto de no tener el servicio de urgencias, se habilitaron consultas médicas programadas y consultas externas. El servicio de urgencias vitales se garantizó durante estos dos meses. Sin embargo, el área de farmacia tuvo inconvenientes, pues al estar cerrada, algunos de los pacientes no pudieron reclamarlos y tuvieron que comprarlos por su cuenta.
De acuerdo con la gerente Vanessa Córdoba, desde el 24 de enero el hospital ya estaba listo para recibir la visita de la Secretaría Departamental . Sin embargo, la visita solo pudo hacerse hasta el 10 de febrero. Marcos Londoño, Secretario (e) de Salud, cuenta que el retraso estuvo relacionado con que los equipos de la gobernación son nuevos y por ahora, pequeños. “Solo hasta ahora estamos iniciando el proceso de contratación y tenemos un rezago de talento humano en todas las áreas. Tenemos un equipo que no es suficiente para atender de forma simultánea todas las solicitudes que nos hacen”.
¿Cuáles fueron los compromisos?
El principal y el más evidente es mantener los servicios funcionando. Londoño indica además que es necesario que los y las funcionarias del hospital reciban acompañamiento para fortalecer capacidades institucionales y asistencia técnica en todas las áreas que muestren fallas en su funcionamiento. “Esto debe hacerse con el fin de evitar los mismos errores que ocasionan este tipo de cierres”, indica.
Qué dice la gente:
- “Nosotros como tadoseños estábamos preocupados con el cierre de estas áreas. Tener la dicha de que ya abrieron es realmente algo muy satisfactorio. Esperamos, también, que se presten los servicios como es debido. Y que si por ejemplo, los usuarios necesitan un medicamento, estos estén y que no nos toque salir a comprarlos, como acostumbramos a hacerlo”, dice Anasiris Mosquera, concejal del municipio.
- Jen Moreno, veedor ciudadano, indicó que la reapertura de los servicios es una noticia positiva. “Esperamos que el servicio siga mejorando y como veedores estaremos pendientes de que se cumplan los protocolos exigidos por las autoridades. Es una buena noticia para la comunidad y vemos que todo está funcionando con normalidad. Antes había muchas quejas por atención, pero ya se ve un mejor trabajo y servicio y no he conocido de quejas”.
- “Para mí fue una sorpresa total. Esperábamos la visita para el 17, pero por fin se dieron las cosas. Esto le deja muchas enseñanzas al pueblo, a aprender a cuidar los servicios y a los médicos. Estos dos meses fueron de mucha zozobra”, cuenta Lina Arriaga, líder del comité del paro que se formó con el cierre de las dependencias en diciembre.
¿Qué sigue?
La Secretaría de Salud indicó que el seguimiento al hospital continuará. Se harán visitas cada dos meses con el fin de hacerle vigilancia y control a los servicios. “Queremos que la entidad territorial haga un acompañamiento permanente y que esté revisando constantemente para que tengamos un componente preventivo y evitemos que estos cierres se presenten de forma recurrente. Nosotros tenemos un equipo que hace seguimiento y monitoreo a la forma cómo estas instalaciones prestan el servicio”, dice Londoño.
Para la gerente, el desafío es evitar un nuevo cierre o de otras áreas. “Lo que continúa para la ESE ahora es más grande que lo que se ha logrado, sostener la prestación del servicio, llevar la prestación a las comunidades logrando mejorar los indicadores de salud. Nos enfocaremos en la Atención Primaria en Salud con el fin de lograr detectar, intervenir y derivar a tiempo las situaciones de salud de la comunidad”, cuenta Vanessa Córdoba.
Lina Arriaga dice que aunque se logró el objetivo de reabrir, seguirán trabajando para lograr mejores condiciones de los usuarios, especialmente en la zona rural. “Esto sigue, el hecho que hayan quitado el sello no significa que vayamos a descansar. Vamos a estar pendiente de lo que haga falta y estar pendiente de que el Alcalde cumpla su compromiso de apoyar el hospital. Queremos seguir con los centros médicos de las veredas, a ver cómo podemos ayudar”.