Foto: Rosiver Tamayo
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¿Qué esperar de la nueva Casa de Víctimas en Istmina?

El alcalde Hever Córdoba Manyoma inauguró el 3 de julio, en el barrio Pueblo Nuevo, el centro integral de atención para las víctimas del conflicto armado, concebido en la administración pasada y ejecutado en la actual.

Por qué es importante: La Unidad de Víctimas había registrado 10.283 víctimas del conflicto en Istmina al comienzo de 2020. Pero Blasney Mosquera Hurtado, coordinador de la Mesa Departamental de Víctimas del Chocó y líder de la Mesa de Víctimas de Istmina, sostiene que esta última tiene hasta hoy 15.236 víctimas registradas. “Eso sin contar las de los municipios aledaños, porque aquí convergen trece municipios más de la subregión del San Juan y Baudó”. 

Toda esa población debía hacer sus trámites en entidades ubicadas en lugares distantes, lo que les implicaba hacer un esfuerzo físico y económico. Por eso, la Mesa de Víctimas se movilizó para promover la obra.

¿Qué ofrecerá esta casa? Hasta ahora, la casa ha servido para agrupar entidades como la Personería municipal, el enlace de víctimas, punto de atención y otras oficinas. Rosvier Tamayo, secretario de Gobierno de la ciudad, dice que tener que desplazarse a diferentes lugares retrasaba procesos muchas veces urgentes. Como dice el funcionario, esta casa buscará sobre todo mejorar los servicios a los usuarios. 

Foto: Rosiver Tamayo

¿Qué dice la gente? En la Mesa de Víctimas quieren que este lugar, además de agrupar las entidades competentes, ofrezca asesoría en acceso a salud, restitución de tierras, compra de vivienda y educación.

“Esperamos que haya una oficina de Icetex, también del Sena... Entendemos que el tema de atención es importante: nosotros como Mesa también tendremos un espacio en la casa para guiar a la población. Sin embargo es necesario que vayamos un paso más allá con ofertas que mejoren nuestra calidad de vida”.

La población quiere que esta casa sea diferente. “Se han creado un sinnúmero de entidades pero siempre hace falta el factor social, que todo sea más humano, y más si se trata de atender a personas que pasaron por situaciones difíciles”, dice Blasney. 

Lo que sigue: La gente reclama y espera programas de apoyo psicológico que no traten a las víctimas como un grupo homogéneo, sino que se enfoquen en la diversidad de casos y formas de tramitar el dolor. Al respecto Tamayo mencionó que un grupo interdisciplinario brindará apoyo psicosocial, pero no dio detalles sobre la forma de ejecutar este programa. La población espera claridad sobre esto. 

El Programa de Atención Psicosocial y Salud Integral a Víctimas (Papsivi), del Gobierno Nacional, opera actualmente en Istmina. Sin embargo, la Mesa se queja, entre otras cosas, de que está desactualizado: “las víctimas de hoy no son las mismas y tienen otras necesidades”.  Aquí también hay un campo para trabajar.

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