Por qué es importante
La Junta está en el mapa turístico del Caribe por ser la cuna de Diomedes Díaz. Después de la muerte del cantante de vallenato en 2013, miles de turistas colombianos y extranjeros visitan el pueblo para conocer sobre la vida de Díaz. La mayoría de los atractivos turísticos del corregimiento han sido creados por los propios habitantes. El parque El Cacique es la primera gran inversión que la alcaldía hace en La Junta para impulsar el turismo y, en consecuencia, mejorar la economía de sus habitantes.
Qué está pasando
En el centro de La Junta se erige una estatua de Diomedes Díaz de cuatro metros de alto, rodeada de calles polvorientas. La estatua, de resina y metal, es el principal símbolo de lo que será el parque El Cacique, una obra en honor al fallecido cantante vallenato que nació en este corregimiento hace 65 años, y en la que se han invertido 2.700 millones de pesos. Pero el paisaje alrededor de la estatua no se parece al de una obra que está ad portas de ser inaugurada: las sillas de concreto están sin espaldar, las zonas verdes son pedazos de pasto que ha crecido por las lluvias de las últimas semanas y tienen algunas plantas sembradas por la comunidad, y, en las noches, la estatua y los 32 triángulos de piedra pegados al suelo que representan los CD’s que grabó Díaz en vida permanecen en total oscuridad.
El problema de la obra no solo es que no corresponde a los planos del proyecto, sino que la estructura tiene fallas evidentes. En La Junta, la gente dice que la plata que se invirtió no se ve y que los materiales utilizados fueron de mala calidad. Fidelia Ariza, fiscal de la Junta de Acción Comunal (JAC) del corregimiento, ha denunciado varias veces que la obra tiene serias fallas. A inicios de abril pasado, Ariza compartió por Facebook y Whatsapp un video en el que caminaba por el parque a medio terminar. “Solamente piso y miren lo fácil que es despegar las baldosas del Parque El Cacique. El material es más arena que cemento. Miren, sigo caminando y el piso tiene movimiento”, dice Ariza mientras levanta con facilidad los cuadrados de losa.
En ese momento, la fiscal de la JAC también denunció que la obra no tenía canales para las aguas lluvias, los jardines que aparecían en los planos no se veían por ninguna parte y tampoco funcionaban los baños construidos. “Yo me tomé el atrevimiento de hacer un video porque al ver una obra y la magnitud de dinero que fue invertido ahí, para nosotros ha sido poco comparado con lo que era Diomedes Díaz. Si es un parque en honor a él no le vemos la verdad el dinero ni la calidad. Hubieran podido hacer algo mejor”, dice Ariza.
Sin embargo, está previsto que la alcaldía inaugure el nuevo parque este mes. En estos días se ven algunos obreros caminando alrededor de la estructuras “afinando detalles”. Hace poco terminaron la construcción de la estructura de ladrillo donde funcionará la cafetería y los baños. Hasta ahora, quienes más le sacan provecho al parque son los niños y niñas de La Junta que juegan en el parque infantil. La Alcaldía de Hatonuevo, como contratante, dice que la obra está al 97 por ciento terminada y solo hace falta el certificado de Air-e sobre las instalaciones eléctricas del alumbrado público.
El proyecto
Los planos del parque El Cacique incluían baños con un pozo séptico, zonas verdes, una cafetería, sillas con espaldar, dos cicloparqueaderos, instalación de luminarias, canecas de basura, una cicloruta, y un parque con gimnasio, juegos infantiles y piso de caucho. Surgió de una iniciativa que presentaron en 2019 los exalcaldes de Hatonuevo y San Juan del Cesar, ante el Órgano Colegiado de Administración y Decisión (OCAD) Caribe, para financiar con recursos del Sistema General de Regalías (SGR). El documento establecía que se debían adecuar, reconstruir y construir un parque infantil y recreativo para cada uno de los municipios.
El OCAD Caribe determinó que la Alcaldía de Hatonuevo sería la contratante de la obra. Es decir, estaría a cargo de seleccionar el contratista y el interventor, y garantizar que se hiciera la construcción. El proyecto de infraestructura tiene un presupuesto total de 5.452 millones de pesos, para El Cacique se destinaron 2.700 millones y para el parque “El Porvenir” en Hatonuevo, los otros 2.700 millones de pesos restantes. El contrato de la interventoría de la obra para ambos municipios costó 404 millones de pesos. El Consorcio Parque Infantiles 2020 tenía que entregar terminado el parque El Cacique el 30 de diciembre de 2020.
La estatua de Diomedes Díaz no estaba incluida en el proyecto inicial porque no se pueden financiar obras de arte con recursos de regalías. Sin embargo, Luis Manuel Daza, exalcalde fallecido de San Juan del Cesar, se comprometió con la comunidad a gestionar la compra de la imagen del cantante que había sido fabricada por Jhon Peñaloza, escultor de Valledupar. Al respecto, el alcalde de Hatonuevo dice que el monumento fue donado por el contratista y “no costó un centavo público”. “Los entes territoriales tenemos prohibido hacer donaciones a particulares o entes que no sean el propio municipio”, explica.
Las irregularidades
Además de la deficiente instalación de las baldosas y las falencias en el desagüe de las aguas lluvia, la comunidad ha denunciado que nunca se instaló una valla con información sobre el proyecto. Tampoco se han instalado todas las luminarias, no se han construido los cicloparqueaderos y no se han vuelto a poner los espaldares de la silletería que fueron enviados a mantenimiento porque se zafaron a medida que la gente comenzó a usarlas. Además, la zona verde no cuenta con plantas de la región que puedan resistir a las temporadas de sequías. “Quedamos en que iba a dar trinitarias (veraneras). Ya era hora que las hubiesen sembrado porque está lloviendo con frecuencia para que ellas puedan crecer”, dice Ariza.
Por eso, muchas personas en La Junta se preguntan dónde está la plata que se debió invertir. La comunidad sostiene que es imposible que la construcción actual haya costado casi 3 mil millones de pesos. “Estuve viviendo en Patillal y allá hicieron un parque maravilloso, costó 5.000 mil millones de pesos. Pero es un parque que tiene prácticamente doce hectáreas. La misma obra pudo haberse hecho acá con 2.700 millones de pesos. Acá no hay siquiera una hectárea construida, hay 8.000 y pico de metros mal construidos”, dice Libardo López, veedor del parque.
Qué dicen los responsables
Hace un mes, Álvaro Díaz, alcalde de San Juan del Cesar, envió una carta a Luis Arturo Palmesano, alcade de Hatonuevo, y al representante de la empresa contratista Consorcio Parques Infantiles 2020 para que revisaran las fallas en la construcción. “Mediante una inspección de la obra se evidenciaron las siguientes irregularidades en algunas actividades ejecutadas: grietas que se están presentando en losas de concreto y bordillos, estancamiento de aguas lluvias en áreas considerables y desprendimiento del piso en tablón por NO (sic) cumplir con el proceso constructivo adecuado en varias áreas del parque El Cacique”, dice el documento.
El 15 de mayo, el Alcalde de Hatonuevo y el interventor recorrieron las obras y se reunieron con la comunidad, algunos concejales y Rafael Humberto Frías, secretario de Planeación de San Juan del Cesar para verificar las falencias. Durante la visita, Palmesano ordenó realizar un estudio a la mezcla que había sido utilizada para pegar las baldosas y un modelado hidráulico para evitar el empozamiento de las aguas en el parque.
A pesar de los reclamos de la comunidad y de la alcaldía de San Juan del Cesar, el alcalde Palmesano insiste en defender la obra y afirma que solo faltan algunos detalles para que sea entregada este mes. Sobre las diferencias con los planos, dice que no son su responsabilidad porque él solo llegó a ejecutar una obra que ya estaba aprobada. Además, asegura, que el problema con el suelo se debió al mal estado del pegamento. “Se utiliza un pegante especial para eso. Se compró el de mejor calidad pero lo que pasó es que algunas de las bolsas de los lotes que se compraron estaban vencidas. ¿Cómo se corrigió? Se quitaron las baldosas de nuevo, se compró nuevamente el pegante de la mejor calidad y se verificó que este lote estuviera con fecha vigente”, dice.
En cuanto a los baños, afirma que el proyecto no incluía la construcción de alcantarillado y se dejará instalado el pozo séptico. Sobre el jardín expresa que “la comunidad solicitó que se echara un tipo de gravilla para embellecer” y se sembraron las plantas como se había solicitado.
Palmesano asegura que no ha habido corrupción y destaca, inclusive, que el proyecto costó menos de lo presupuestado inicialmente. “Todo se ha manejado con transparencia desde la contratación pública, que fue abierta, y así mismo se dio con el proceso de adjudicación. Se ha desarrollado la obra como estaba contemplada en el proyecto, que inicialmente era casi de 6.000 millones de pesos y bajó a menos de la mitad: 2.900 (millones de pesos) incluida la interventoría y los descuentos del Estado. Se hizo un parque muy bonito”, dice Palmesano.
Hasta la fecha, la obra no ha tenido ningún seguimiento por parte de los entes de control. Además, la veeduría, aseguran Libardo López y Fidelia Ariza, nunca funcionó y fueron algunos líderes de la comunidad quienes se convirtieron en veedores. “Vi una raja en el concreto que se estaba dilatando y tomé foto. Luego, cuando llovió vi la piscina y dije ‘ve, no habían dicho que esto iba a tener una piscina’ y tomé una foto. Donde pusieron la estatua de mi compadre también quedaba agua empozada y le tomé foto. Se las envié al Secretario de Planeación y así se hizo presión al Alcalde”, cuenta Rubén Darío Araujo, uno de los amigos íntimos de Diomedes Díaz.
Rafael Humberto Frías, secretario de Planeación de San Juan del Cesar, dice que su administración sólo tiene la responsabilidad política de hacer control social. “Al municipio de Hatonuevo le corresponde como ejecutor contratar la interventoría y como ejecutor le corresponde, dentro de sus competencias, el ejercicio de la supervisión. Son ellos los que tienen que responder por la ejecución de la obra de conformidad como fue diseñada”, explica. “Hasta ahora hemos hecho algunos controles de advertencia y hemos interactuado con el municipio de Hatonuevo para que se mejore la calidad de las obras en cuanto a especificaciones técnicas, tomando como base las quejas que ha presentado la comunidad”, agrega Frías.
Para Libardo López es evidente que la comunidad se tendrá que conformar con lo que les entregaron. “La apuesta últimamente es corregir algunos detalles de construcción, pequeños detalles, pero hasta ahí no más. Aquí se destruyó el parque antes de terminarlo, y lo que lo destruyó fue la mala calidad de los materiales y la aplicación de los mismos. La infraestructura de la obra no se va a mejorar, esto queda así y nosotros los junteros tenemos que acostumbrarnos a ver esta cosa que ellos llaman parque”, dice.
Qué dice la gente de La Junta
En el corregimiento esperaban que el parque estuviera listo el 26 de mayo, para celebrar el cumpleaños número 56 de Diomedes Díaz, a quien conocen como “El Cacique de La Junta”. Pero, al igual que en 2021, ese día no pudieron inaugurar la obra. La celebración a su ídolo, a quien además le agradecen el surgimiento del turismo como fuente de empleo, quedó empañada. La construcción hoy es, además, un punto de discordia entre quienes defienden a la administración de Hatonuevo y las demás personas que creen que poco se cumplió de lo prometido en los planos.
- “Pa la cantidad de plata no le han hecho nada. Nos prometieron más turismo y sí han llegado más turistas por la estatua y uno tiene cómo trabajar pero al parque le falta mucho”, dice Sara Gámez, vendedora de fritos de La Junta. “Las irregularidades son muchas. Mire, enseguida la gente se apoyaba en el espaldar de las sillas, se caía. Enseguida fue lo de las baldosas, se movían y tuvieron que denunciar eso”, cuenta.
- “El parque está en un 99 por ciento. Están corrigiendo unas cosas que dejaron fuera de nivel y se empozaba el agua. También, estaban corriendo unos juegos que instalaron para los niños”, cuenta Rubén Darío Araujo. “Tenemos que esperar cuando esté listo. Yo sé que ese parque mal no lo van a recibir. El pueblo no lo va a recibir en mal estado. Yo tengo una casa frente al parque y me sirve que lo entreguen bien”, agrega
- “En ningún momento he estado conforme con la obra. De hecho, sigo siendo el gran opositor su desarrollo. La obra en sí no traerá turismo, nunca va a traer un turista. Aquí los monumentos van a traer el turismo, como son la ventana marroncita y la estatua de Diomedes Díaz. Pero la obra en sí no, porque esto no tiene ningún atractivo como parque”, dice Libardo López.
- Por su parte, Alfonso Gutiérrez, un habitante del corregimiento, asegura que aunque el parque no está terminado ya se puede ver los beneficios que traerá. “Con la construcción del parque ya las personas han comenzado a montar sus negocios y están abriendo. En unos meses, cuando el parque esté totalmente terminado, ya van a haber más negocios. Los junteros nos tenemos que pellizcar porque hay muchas cosas que los turistas necesitan”, dice Gutiérrez.
Sobre las falencias, Gutiérrez es crítico. “Nosotros hicimos un poco de reclamos que no se tomaron en cuenta a la hora de la construcción del parque, como fue el caso de las aguas lluvias. Hizo falta hacer un estudio para que esas aguas salgan por el sitio adecuado ya que inundaban el parque, pero ya se están haciendo los correctivos”, cuenta.
- “El parque en honor a Diomedes es más que merecido porque gracias a él, La Junta es reconocida a nivel nacional y mundial. Por eso yo he denunciado que entregar una obra con tantas falencias no es la idea. Es como tener falta de respeto para el pueblo de La Junta y el municipio de San Juan del Cesar”, dice Fidelia Ariza.
“La verdad yo particularmente siento que no ha sido una obra satisfecha y que ya entraran los entes de control a mirar más a fondo qué fue lo que sucedió con los recursos que no fueron invertidos en su totalidad, porque nosotros no sabemos. Una falla también grande fue que desde el principio no hubo una valla (de obra), la omitieron. Un funcionario de la Alcaldía de Hatonuevo respondió que si yo quería ver una valla que fuera a Hatonuevo y viera la del parque de allá”, añade Ariza.
Lo que sigue
- Los habitantes de La Junta coinciden en que si hay falencias al momento de la entrega, se opondrán a recibirla. “La Alcaldía de Hatonuevo se comprometió públicamente, con acta firmada, que nos van a entregar una obra al 100 por ciento. Eso es lo que esperamos recibir. De otra manera, no creo posible que el alcalde de San Juan, Álvaro Díaz reciba la obra si no está terminada. Al igual, lo haría la junta de acción comunal si vemos fallas”, dice Jhon Jairo Acosta, presidente de la JAC del corregimiento.
En La Junta esperan además que llegue más inversión para impulsar integralmente al corregimiento. “Le pedimos a todos que volteen su mirada hacia La Junta para mejorar sus calles porque es muy triste que vengan las personas y las calles están totalmente deterioradas. Aquí llegan carros de gama alta y da pena y al mismo tiempo ellos preguntan dónde está el gobierno, qué hacen aquí en La Guajira y qué les podemos responder si todos sabemos qué hacen”, dice Ariza.
- Por su parte, Luis Arturo Palmesano, alcalde de Hatonuevo, asegura que están trabajando a contrarreloj para cumplir con los compromisos. Una vez concluidas las obras invitarán a la comunidad, el representante del consorcio, el interventor y a la Alcaldía de San Juan del Cesar para hacer la entrega del parque. De no recibir de satisfacción la obra, dice que no se girará el dinero faltante al contratista.
“Obviamente también hay que hacer unos compromisos comunitarios del cuidado de la obra como tal y también los compromisos que debe asumir la alcaldía de San Juan en cuanto al mantenimiento de la obra. Todos los recursos invertidos por regalías a todas esas obras deben tener periódicamente un respectivo mantenimiento para evitar su deterioro”, agrega Palmesano.
- Rafael Humberto Frías, secretario de Planeación de San Juan del Cesar, indica que están a la espera de la convocatoria de la Alcaldía de Hatonuevo para recibir la obra. Pero es enfático en que evaluarán cada detalle de lo acordado entre los ajustes a la obra. “En nuestra condición de arquitectos vamos a conceptuar, vamos a opinar y lo que no esté acorde con las advertencias que hemos venido haciendo pues lógicamente el Alcalde no lo va a recibir”, dice Frías.