Primera cosecha de algodón del año en Fonseca
Haitin Alfredo Herrera Marchena
Desde febrero y hasta la primera semana de marzo, los agricultores del municipio de Fonseca harán la primera recolección de algodón de 2022. Estos productores, que tradicionalmente han sembrado arroz, decidieron migrar al cultivo de algodón debido a los altos costos de los insumos, el bajo precio del grano y la importación del cereal desde otros países.
Esta cosecha podría determinar el futuro del cultivo del arroz en el municipio. Según Elver García, agricultor, una tonelada de arroz está a $1.360.000, mientras que la de algodón puede variar entre $10.000.000 y $10.500.000, según el precio del dólar. “Estamos trabajando a pérdida”, asegura. Actualmente, al menos 5.000 personas viven del cultivo de arroz en Fonseca, lo que ocupa más de 700 hectáreas del territorio.
Protesta en colegio por baja cobertura del PAE
Yonairo Gómez
Esta semana, estudiantes, padres y madres de familia del Centro Educativo Almapoque se reunieron para protestar por la baja cobertura de los cupos para las raciones alimenticias de los estudiantes de la institución. A esto se suma que aún no hay rutas de transporte escolar.
El Programa de Alimento Escolar (PAE) ha enviado alimentos que sólo cubre a 16 niños, dejando a más de 50 estudiantes que asisten de manera presencial sin este beneficio. La secretaria de Desarrollo Social del municipio, Luisa Margarita Acosta, afirma que la cobertura del PAE inició este año en un 40% y que se espera que en los próximos días aumente a un 100% para garantizar la alimentación de los estudiantes. También indicó que espera que la próxima semana se reactiven las rutas escolares y quedar a paz y salvo con los niños y niñas de las instituciones educativas de Fonseca.
Campesinos encuentran alternativa para vender sus productos en Barrancas
Betsabé Molero
Agricultores de las veredas Puerto López, Marimondas, Las Colonias y Las Bendiciones, del corregimiento de Conejo, han empezado a vender sus productos en Barrancas, a 10 minutos de Fonseca, donde funciona un mercado campesino todos los viernes en la plaza principal.
Los motivos para vender en el municipio vecino son varios: a los corregimientos de Fonseca han llegado revendedores de frutas y verduras; los proveedores de Valledupar y Bucaramanga acapararon los mercados grandes del municipio; y no hay espacios locales para comercializar los productos. Además, las vías están en mal estado y no pagan lo justo. “Muchas veces en Fonseca lo quieren muy barato sin tomar en cuenta el trabajo de uno para sacar el producto en mulos y motos hasta el pueblo, últimamente me he ido a Barrancas porque allá puede uno venderlo todo”, asegura Donicel Cuevas García, productor de fríjol, maíz y yuca.