Por qué es importante
El grupo armado Ejército Revolucionario Guevarista (Erg), una disidencia del Eln, causó en 1998 el desplazamiento masivo de la comunidad de Guaduas. La vereda quedó deshabitada, pero desde 2004 empezaron a retornar algunas personas. En 2008, cuando se desmovilizó el grupo y más personas regresaron al territorio, empezaron un proceso de reparación colectiva y acordaron repensar la vereda bajo el eslogan “Guaduas: paraíso verde, tierra de paz y reconciliación”, pues allí viven víctimas y excombatientes.
Este mirador es una de las primeras acciones para posicionar la vereda como un destino ecoturístico dentro de El Carmen de Atrato.
Los detalles
El pasado 17 de septiembre la comunidad de la vereda Guaduas terminó el Mirador Ecoturístico del Alto Guaduas.
- El mirador está construido en guadua nativa, haciendo honor al nombre de la vereda, y con piedras del territorio.
- Desde el mirador, cuando no hay niebla, se puede ver todo el Valle del río Guaduas, así como la confluencia de las quebradas Babosa y Cristalina. Incluso se puede ver el Valle La Alberia, los Farallones del Citará y zonas lejanas en la cordillera Occidental.
También se ven montañas que pertenecen a los municipios de Lloró, Bagadó y límites con el departamento de Risaralda. “Es muy atractivo para aquellas personas que conocen muy bien la geografía. Podrían identificar cerros de partes lejanas”, dice Marcela Sánchez.
- El mirador queda a una hora de la cabecera municipal de El Carmen de Atrato, entrando por el paraje La Sánchez.
- Se puede llegar en chiveros o en moto. Los chiveros, que llevan, esperan y regresan a los turistas, cuestan alrededor de 140 mil pesos y pueden transportar entre 10 y 12 personas.
¿Cómo se gestó el proyecto?
La idea del mirador nació en 2018, cuando Diana Lily Aguilar, docente carmeleña del área de Turismo y Gestión Turística de la Universidad Tecnológica de Chocó (UTCH), conoció la visión de reparación colectiva y de retorno que tenía la gente de Guaduas. En ese momento propuso articular el turismo como actividad productiva y empezó, junto a la gente, a identificar atractivos turísticos, entre ellos el Mirador Alto Guaduas.
Diana Lily dice que decidió acompañar en este proyecto a la comunidad de Guaduas por amor al territorio, y destaca el potencial del paisaje, fauna, flora, reptiles, anfibios. “El empuje, y la visión clara de la comunidad, con el sentido de pertenecía por el territorio” también la motivaron.
Las personas de Agroecotur Guaduas, una asociación que nació en 2015, recibieron varias capacitaciones por parte de la UTCH. Y en 2019 le presentaron una propuesta a la organización internacional Alianza del Clima, que apoya iniciativas que generen impactos positivos para el medio ambiente.
Alianza del Clima aceptó la propuesta, pero por la pandemia debieron aplazar el proyecto que finalmente empezó este año.
Carolina Osorio Rugeles, directora de proyectos de la Alianza del Clima (Vorarlberg & Chocó), desde Austria, explica que apoyaron el proceso porque “va de la mano con la protección, y conservación del bosque húmedo, como un ecosistema estratégico para mitigar el cambio climático a nivel mundial, desde la ecología holística y en el diario vivir desde los territorios. Además esta perspectiva apoya procesos comunitarios, interétnicos, étnicos y campesinos, en aras de una buena educación ambiental”.
Con los recursos de la Alianza del Clima, el trabajo estuvo completo con la participación de algunos miembros de la comunidad. A través de tres convites lograron recoger piedras, subir arena y luego las guaduas; la Alcaldía municipal con el transporte de los materiales; la Asociación de Transportadores de El Carmen (Asocar) con un aporte económico; y la Fundación Proaves con el aporte de uno de sus empleados. Una vez tuvieron todos los materiales, la construcción del mirador tardó tres días.
¿Qué dice la gente?
- Álvaro Sánchez, habitante de la vereda de Guaduas e integrante de AgroEcotur Guaduas y del Comité de Turismo y Conservación, dice que siente gratitud hacia quienes han participado en este proceso. “Hemos trabajado en medio de dificultades y, si bien todavía falta embellecerlo y terminar de adecuarlo, ya es un hecho”, dice. Y agrega que el mirador es una oportunidad para “seguir visibilizando nuestra vereda como un excelente destino turístico, de gente que se siente orgullosa de su esencia campesina, ancestralidad, y relevo generacional de nuestra gente, pero queriendo apostarle a una alternativa diferente, conservando nuestra esencia pero con una visión global”.
- “Los talleres de turismo han sido muy beneficiosos, ya que debido a eso se tiene la visión de que sea un turismo sostenible en el tiempo. Si desde allí se visibiliza la vereda, habrá un mayor reconocimiento y se tendrá mayor motivación para seguir mejorando los atractivos turísticos”, dice Flor Alba Dávila, habitante de Guaduas.
- Maria Efigenia Restrepo, por su parte, dice que el mirador es importante “porque la gente de otra parte puede tomarse fotos y observar la vereda desde allí”. Agrega que ahora van a trabajar por señalizar las rutas y la zona.
Lo que sigue
La comunidad de Guaduas sigue buscando aliados para seguir trabajando en su visión del ecoturismo. Actualmente están por terminar dos senderos ecológicos: La Cristalina y Los Guamales. Además, tienen claro que deben seguir con las adecuaciones de alojamientos, restaurantes y guías. Así, consideran, podrán ofrecer turismo de naturaleza, con los aspectos básicos para resaltar el territorio.
En los próximos días, como estrategia publicitaria, instalarán en el paraje de La Sánchez, sobre la vía Medellín - Quibdó, un aviso con la ruta al mirador.
Si quieres visitar el mirador puedes contactar a Agroecotur escribiendo al número de Whatsapp +57 320 273 9248.