PÓDCAST | El entierro de Gallego

Maira Fragozo
Maira Fragozo

Desde que soy una niña he escuchado historias de mis mayores, que aunque parecen puro cuento, dentro de ellas suele encontrar un poco de realidad. Mitos y leyendas que se esconden en los caminos solitarios, en las noches, y hasta en las montañas. Hoy desde San Juan del Cesar, La Guajira te contaré uno de ellos, que en alguna tarde uno de mis tíos me contó.

Trata de un cerro ubicado en la zona de la represa el cercado, conocido como el cerro Gallego, según cuenta mi tío Hugues Oñate, ese cerro lleva ese nombre por un militar de apellido Gallego quien vino a refugiarse en ese cerro, y enterró allí sus riquezas. 

Hubo un general gallego que venía huyendo de la guerra de los 1000 días y él como que se refugió ahí, se subió en un cerro. En el cerro hay un plano bonito, era un plano bonito. Anteriormente esos cerros eran sabanas limpias

“Él en su andanza enterró su riqueza ahí. Y en un palo que estaba ahí, él puso una estaca y una aldaba. La aldaba era como una rueda y él en esa rueda amarraba el caballo de él.

Y en ese en ese mismo palo, en ese mismo palo enterró el oro”. 

Con el pasar de los años, asegura la gente que el general Gallego y sus ancestros hicieron pactos con el diablo para proteger  las riquezas que habían enterrado allí y, a través de revelaciones en los sueños, le mostraban a los suyos donde estaba el tesoro. 

“La gente identifica eso porque  todos los viernes santos, donde hay esos entierros, hay una visión, una luz o algo que a las 12 de la noche eso alumbra. Entonces, mucha gente vivía pendiente de eso para sacar los entierros. Como anteriormente todas estas tierras eran de indígenas. Y el indígena siempre enterraba sus bienes, su oro, sus vainas, las huacas que le  decían”. 

Cada vez que alguna persona intentaba subir al cerro de Gallego para sacar las riquezas, el cerro se estremecia, se sentía el galope del caballo y asegura mi tío Hugues que salían espantos. 

“Muchas personas intentaron sacarlo, pero cuando estaban sacando eso como que se formaba una brisa y sentía el caballo que venía. Y la gente salía corriendo, le tenía miedo. Siempre había espantos, vainas ahí. Se escuchaban voces, vainas y eso. Entonces, este señor de Guayacanal Jone con el hijo, no respetaron esos miedos ni nada, como que  eran más poderosos que los otros y se pusieron a sacarlo. En eso se les presentó el tropel a ellos, entonces salieron corriendo. El papá de Chido tenía dificultad para correr y Chido salió corriendo y lo dejó a él enredado por ahí. Y  después de eso él murió, no habló más ni nada y se murió”

Desde esa ocasión nadie más tuvo la intención de sacar esas riquezas. Hoy esa zona donde está ubicado el cerro Gallego fue comprada por los encargados de la represa del Cercado. Según cuenta la gente, los soldados hicieron una base allí, y en varias ocasiones ellos han contado que se asustan porque escuchan voces y mucho ruido y aunque usan sus tiros como defensa nunca encuentran nada allí. 

La historia anterior hace parte de un especial de Halloween para El Megáfono.

Les habló Maira Fragozo, periodista de la red Consonante en San Juan del Cesar, La Guajira.

Escúchalo en
Archivado en

Contenido relacionado

cross
Consonante
Resumen de privacidad

Esta web utiliza cookies para que podamos ofrecerte la mejor experiencia de usuario posible. La información de las cookies se almacena en tu navegador y realiza funciones tales como reconocerte cuando vuelves a nuestra web o ayudar a nuestro equipo a comprender qué secciones de la web encuentras más interesantes y útiles.