Oh glorioso San Antonio de Padua, abogado de los objetos perdidos y de las causas difíciles te pido que intercedas ante Dios para que me conceda encontrar mi objeto perdido. Confío en tu poder y tu bondad y te suplico que me ayudes en mi necesidad. Te prometo que si me concedes esta gracia, te daré gracias y te honraré siempre.
Amén.
Sory Marceja Jordán: En el departamento del Choco, cada año se celebran las fiestas patronales en honor a San Antonio, como agradecimiento a sus milagros. Cruz. San Antonio de Padua fue un sacerdote que nació en Lisboa, Portugal en el año de 1195 en una familia adinerada. Fue bautizado como Fernando, pero cuando se unió a la Orden Franciscana decidió llamarse Antonio. La Orden Franciscana fue fundada por San Francisco de Asís y se enfoca en el servicio a los demás, especialmente a los más pobres y necesitados.
Por eso, se dice que San Antonio de Padua es padre de los pobres, así nos lo cuenta José Edelmiro Maya, sacerdote de la iglesia La Santísima Trinidad del barrio Reinaldo Perea.
José Edelmiro Maya: Él optó por la pobreza evangélica, siendo de una familia archimillonaria. Él vio, sintió y reconoció al Señorío de Dios en él y dijo: "en pobreza, castidad y obediencia encuentro la santidad." Y se dedicó al evangelio, a llevarle almitas al Señor, a evangelizar y es un hombre muy buen predicador. Las homilías de San Antonio de Padua es gloria bendita.
Sory Marceja Jordán: San Antonio es un santo muy poderoso. De hecho, en las imágenes es representado con el divino niño en sus brazos porque, según cuentan, Jesús se le apareció en forma de niño.
José Edelmiro Maya: Y en el camino de la vida él quiso, él soñaba siendo el juguete más pequeño y más humilde del niño Dios y él decía: "qué gozo, qué ilusión yo poder cargar al niño Dios." Y un día el Señor le dio ese don, se le apareció como niño y él lo cargó.
Por eso San Antonio de Padua aparece cargando un niño porque el niño Dios se le presentó, pero oiga, estamos hablando del año 1.221 más o menos, entonces imagínate tú, el Señor se le presentó y él lo pudo cargar.
Por eso también a San Antonio se le invoca como santo de los imposibles, porque el Señor a través de él entonces realizó un imposible en la vida de San Antonio, que era presentársele niño y él lo cargó.
Sory Marcela Jordán: Al santo de los imposibles, como lo menciona el sacerdote José Edelmiro, también se le atribuyen otras historias fascinantes.
Por ejemplo, cuentan que en una ocasión, San Antonio tenía una hostia consagrada y le ordenó a una mula lo siguiente:
“En virtud y en nombre del Creador, que yo a pesar de ser indigno, tengo verdaderamente entre las manos, te digo, oh animal, y te ordeno acercarte enseguida y con humildad y ofrécele la debida veneración”. La mula se acercó, agachó su cabeza y se arrodilló.
Otra historia dice que, una vez un hombre se robó un libro de oraciones muy importante y San Antonio, con oraciones, logró que el ladrón se arrepintiera y devolviera el libro.
Partiendo de esa historia, se le conoce en Chocó por ayudar a aparecer los objetos perdidos, y se puede comprobar con las oraciones o cuando se invoca el nombre de este justo.
Esmirna Mosquera: Hay gente que tiene cosas de valor y se la han perdido y San Antonio se las ha hecho aparecer, así hayan pasado varios días. Y en otros casos que uno, a mí se me ha pasado eso, que guardo algo y no recuerdo dónde lo guardé, lo invoco y me lleva directamente allá donde yo he puesto eso que se me había olvidado.
Sory Marcela Jordán: A quien acaban de escuchar es Esmirna Mosquera, habitante de Tadó y una fiel devota de San Antonio. Su fe fue heredada de su abuela Marciana Rengifo, quien tenía un altar dedicado al santo y le oraba todas las noches.
Esmirna Mosquera: Allí en su alcoba con un ornato donde tenía muy refugiados a San Antonio de Padua y también a la Virgen del Carmen. Y ellos oraban permanentemente todas las noches a San Antonio y ella no dejaba que la vela, en esa época no usaban vela, la lámpara, ella decía: "la lámpara de mi padre San Antonio no se puede apagar." Y siempre tenía la lámpara de San Antonio encendida.
Sory Marcela Jordán: Esmirna Mosquera nos contó que su abuela guardaba una imagen de San Antonio que le había regalado un tío cuando era niña. Esa imagen era muy importante para ella porque al mirarla recordaba que había sido testiga de una historia del Santo de los imposibles.
Esmirna Mosquera: y las mandaron a ellas, Juana Torres y a Marciana a hacer un mandado ahí, que vayan a la quebrada y me traen tal cosa. Ellas se fueron y van en la quebrada cuando ven que San Antonio iba delante de ellas y se miraron ellas dos y dicen: "y ese no es San Antonio que va allá." Que sí, que San Antonio. Ellas fueron e hicieron su mandado.
Y entonces, ellas hicieron su mandado, lo que les habían dicho que llevaran de allá de la quebrada y llegaron a la casa rapidito y le dijeron a los mayores lo que habían visto y les dijeron: "muchacho, no dice mentira, ¿ustedes por qué están diciendo mentira? ¿Cómo van a decir que San Antonio iba allá delante de usted?
Que sí, San Antonio iba allá, él era el mismo que iba allá delante de nosotras. Los viejos dicen: "San Antonio está acá montado en su ornato". Y fueron a verlo y estaba lleno de barro. Quiere decir que allí entendieron que las muchachas no habían dicho mentira porque San Antonio se había ido delante de ellas a acompañarlas a hacer el mandado. Todas esas experiencias nos han servido a nosotros para tener esa fe y esa esperanza en San Antonio de Padua.
Sory Marcela Jordán: Esa fe en San Antonio de Padua fue también una herencia de la Iglesia Católica. Chocó fue uno de los lugares al que llegaron los españoles a colonizar y a esclavizar. Para lograr eso, se ayudaron de la religión católica para enseñarles a las personas esclavizadas a temer y a obedecer. Pero al final, volvimos propias esas creencias que también nos han ayudado a dignificar nuestra historia y vida.
El historiador Hermes Sinisterra nos cuenta un poco de la relación entre la Iglesia Católica y los santos en los que hoy creemos.
Hermes Sinisterra: En el catolicismo, la iglesia impuso condiciones de creencias de acuerdo a los intereses de cada sacerdote en la asistencia espiritual en los pueblos. Por ejemplo, tú notas que en Tadó la mayoría de las quebradas tiene nombre de santo. ¿Por qué será? Te preguntas, ¿por qué será? Porque en Tadó la iglesia católica dominó el sistema esclavista. Ella era la dueña de los esclavos prácticamente y de las minas. Y en el lugar donde estaban trabajando una mina, a ese lugar le daban el nombre de un santo.
Ahora, también hubo una orden de la corona española, del rey de España que ordenaba en cada mina y en cada pueblo construir una iglesia para que los negros esclavos asistieran a las actividades religiosas los fines de semana o los días festivos.
Sory Marcela Jordán: San Antonio de Padua falleció el 13 de junio de 1.231 a la edad de 36 años.
Aunque este intercesor sea de otra nacionalidad, en Colombia tiene muchos devotos. Por esta razón San Antonio es muy venerado en el departamento de Chocó, especialmente en el municipio de Tadó en el corregimiento de Corcovado, que cada año, desde el 4 de junio, se realizan sus festividades para honrar y glorificar a este santo por los favores recibidos.
En las fiestas se viven diferentes actividades litúrgicas como cantos, danzas, procesiones y desfiles con su imagen.
Maria Belarmina Mosquera: Desde que empezó San Antonio, desde que empezó la fiesta aquí de San Antonio he estado yo aquí al pie de San Antonio. Y libre de eso, a donde oiga que está San Antonio, yo me acerco, al asunto de las misas porque como le digo, soy muy devota de San Antonio y le tengo mucha fe. Tengo mucha historia que a mí me han sucedido.
Sory Marcela Jordán: Maria Belarmina Mosquera es otra devota de San Antonio que no se pierde ninguna fiesta ni ninguna oportunidad para agradecerle, ya que si de milagros se trata, San Antonio de Padua únicamente no hace aparecer los objetos perdidos, también ayuda en cuestiones de amor cuando se le invoca diciendo ¡Ay San Antonio dame un novio!
Maria Belarmina nos cuenta su experiencia.
Maria Belarmina Mosquera: Yo le pedí a San Antonio que me diera un novio y me dio un novio en mi juventud. Y también le pedí por medio del Espíritu Santo que yo quería ser una persona de llegar a una edad que tuviera un don de un matrimonio.
Yo le decía por medio del Espíritu Santo que San Antonio me lo iluminara y me diera esa dicha y me diera ese día. Y una noche me soñé que me estaba casando. Y de un momento a otro el señor compañero que tenía me ofreció, me dijo: "Belarmina, casémonos" y yo listo. Nos casamos.
Y gracias a Dios no me no me malayo, porque gracias a Dios el tiempo que viví con él vivimos bien, nos comprendimos y viví bien con él, a pesar que teníamos tiempo de estar viviendo juntos. Cuando nos casamos vivíamos más mejor todavía que cuando estábamos viviendo así.
Sory Marcela Jordán: Ante los favores recibidos por este justo, hay quienes visitan lugares en busca de personas que se sepan la oración de San Antonio para que los ayude ante la necesidad que tengan.
Recuerdo que una vez a mi sobrina se le perdió el celular, y alguien le recomendó a una mujer en Tadó que cariñosamente es conocida como la señora de las Runchas. Una vez mi hermana llegó allá le explicó todo, ella le respondió: le voy a prender una vela a San Antonio para ver qué muestra. Después de unas horas, la señora le dijo a mi hermana que el celular estaba en la casa de alguien que lo había tomado, y efectivamente así fue, el celular apareció.
Es importante resaltar que al momento de hacer la oración se debe encender una vela, preferiblemente blanca. Esa vela la cual da a conocer con su llama un veredicto bien sea positivo o negativo, es decir si cuando se enciende la vela su llama es abundante es muestra de que el objeto perdido puede aparecer, pero si la llama es poca y la vela empieza a llorar es fijo de que lo que se perdió se perdió.
Maria Belarmina Mosquera: Digamos, a una persona se le pierde algo. Lo único que le pido a la persona es que no vaya a dejar a correr tanto tiempo. En poquito tiempo llegue, si se da cuenta llegue. Yo le pongo la oración a San Antonio porque gracias a Dios me la aprendí por mi papá que me la enseñó. Poniendo la oración a San Antonio no se puede cobrar a nadie un peso.
Si lo que la persona se le ha perdido, aparece, entonces llegan donde uno y le da una gratificación. No tengo derecho a cobrar, porque él no me lo exige.
Sory Marcela Jordán: Recordemos que San Antonio de Padua intercedió por los pobres, por eso no se debe cobrar cuando se ayuda a una persona por medio de él.
Según cuentan los historiadores, fue un hombre tan virtuoso que por eso su lengua se conserva incorrupta en un relicario de oro en la Basílica de San Antonio de Padua en Italia.
La fiel feligresa Esmirna Mosquera resalta que con mucha fé y devoción le pidió a San Antonio que le concediera la dicha de poder visitar la Basílica en Padua, Italia, donde reposa la lengua del justo. Y se lo concedió.
Esmirna Mosquera: Yo, particularmente, cuando hice por primera vez la novena a San Antonio de Padua, ya al final de la novena dice que la lengua de San Antonio está en Padua y que no tuvo corrupción.
A mí eso me llamó mucho la atención y siempre le dije a San Antonio que yo quería ir a ver eso, que me diera la oportunidad de ver personalmente eso que yo estaba leyendo allí. Y realmente me dio esa oportunidad y yo estuve en Italia y nos llevaron a Padua. Y efectivamente allá está en un cofre de vidrio toda la lengua de San Antonio de Padua sin corrupción.
O sea que San Antonio de Padua nunca dijo mentira y las cosas que él decía sucedían. Todo eso me ha llamado la atención y me ha permitido ser fiel devota de San Antonio y yo cada vez que es necesario lo invoco y ahí está presente él.
Sory Marcela Jordán: Casi un año después de su muerte, el 30 de mayo de 1.232, el papa Gregorio IX lo proclamó santo por todos los milagros que se le pudieron comprobar.
Más de 7 siglos después de ser canonizado como santo y a más de 7.000 kilometros de Portugal, en Tadó, Colombia lo veneramos y agradecemos por los favores que nos hace.
Como dice la canción. Digo yo que el santo que no me quiera que no me preste favores tampoco yo le prendo vela. Pero a San Antonio si hay que prenderle su vela por eso muchas mujeres acuden a él, y con mucha fe exclaman: ¡Ay, San Antonio! Dame un novio y le decís a San Benito que sea bonito.
Este es un episodio de El Megáfono, un pódcast de Consonante.
Les habló Sory Marcela Jordán.
Créditos:
Locución: Sory Marcela Jordan
Guión y entrevistas: Sory Marcela Jordan
Edición: Valeria Ortiz
Ilustración: Camila Bolívar
Coordinación general: Ángela Martin Laiton